martes, 14 de diciembre de 2010

Adios, adios...

Son muchos los que se van.
Nos apena que se vayan los que nos aportan canciones, o libros, o conocimiento.
Nos apenan más los que, siendo honestos, solidarios, comprometidos
con los parias, los valiosos para la sociedad entera y
con el mundo entero, hacen mutis definitivamente.

Enrique nos deja su valentía emprendedora, su ancho saber y su amar la música.
Me siento conmovida junto con muchos otros por ésta pérdida.

Cierto que la Parca no hace distingos, que todos emprendemos el viaje en cualquier momento. Pero si nos hubiesen preguntado, nuestra respuesta hubiese sido: a este, no. Dejádlo un ratito más a nuestro lado.

Siempre cantará, sólo que no oiremos sus nuevas canciones.

Hasta siempre, Emrique. Enrique Morente.

viernes, 3 de diciembre de 2010

Observaciones

A diario, cuento aproxímadamente entre venticinco y treinta aviones de esos que traspasan la barrera del sonido. Parecen dirigirse y partir de Rota.Hay que aclarar que estos pájaros metálicos vuelan hacia el atardecer. Algún que otro día los he visto desde la cocina al mediodía.
Como es lógico no estoy pendiente de ellos,; pero alzo la vista y ahí están, uno tras otro, incluso doce o trece a la vez cruzan el espacio.

¿Qué cantidad de gasolina gastarán? ?Cuanto material humano se necesita para esto? ¿Cuanta polución generan? ¿Es necesario esa cantidad enorme en aparatos de esta índole mientras la pobreza anula países enteros?

No es entretenido sino doloroso ver esto día a día.

Tenía que contárselo a alguien.
Seguro que es una nadería...